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Día de la Cosmonáutica (День космонавтики)

El Día Mundial de la Aviación y la Cosmonáutica marca el inicio de la era espacial, que comenzó el 2 de Abril de 1961. Aquel día, el primer hombre fue puesto en órbita, el cosmonauta soviético Yuri Gagarin, tras pasar 108 minutos históricos en el espacio.

El 12 de abril de 1961 empezó para Yuri Gagarin a las 5:30 de la mañana en la casita de descanso de los cosmonautas. Al salir de la habitación, dejó su firma en el marco de la puerta, y desde aquel entonces esto se convirtió en una tradición de todos los cosmonautas.

Cuando el director del proyecto le dio la última indicación, en el momento de despegue Gagarin le respondió con calma: “¡Vámonos!” (“Poyéjali” en ruso). Esta frase se convirtió en uno de los símbolos de la era espacial y en parte de la cultura popular rusa, y hasta ahora se sigue usando antes de iniciar algún trabajo o proyecto, o como brindis. “¡Ojalá vuele y regrese vivo!”, dijo el ingeniero general Serguéi Koroliov después del despegue del cohete portador.

El mensaje del vuelo exitoso fue transmitido por todas las estaciones de radio de la URSS. Así el mundo conoció al piloto cosmonauta de la URSS, el mayor Yuri Alekséyevich Gagarin, el primer hombre en la historia que logró ver nuestra Tierra desde el espacio. Esto, claramente otorgó a la URSS un lugar pionero en el ámbito de la exploración espacial.

En Rusia, ese día se pueden ver una gran variedad de actividades que van desde grupos artísticos vestidos con el uniforme de Yuri Gagarin, Valentina Tereshkova y los extraterrestres, así como fiestas para niños en el Planetario de Moscú, donde los niños pueden conocer a los astronautas y ver cómo funciona una estación espacial, qué es un agujero negro o cómo se mueven los planetas.

Rusia aún tiene un papel preponderante en el campo de la Cosmonáutica, realiza casi una cuarta parte del total de lanzamientos espaciales a nivel mundial.

El 14 de marzo de 2017, se abrió en Rusia la convocatoria para reclutar entre seis y ocho cosmonautas, que entrarán en el programa de vuelos espaciales a la Luna. Se espera que los participantes se conviertan en los primeros pilotos de la nueva nave espacial Federatsia. Además, serían los primeros ciudadanos rusos que ‘caminarían’ por la Luna.

Desde el cosmódromo Vostochni se prevé efectuar el primer lanzamiento de la nave espacial tripulada Federatsia en 2021. El primer vuelo será no tripulado. Los cosmonautas viajarán a bordo en el 2023.

Yuri Gagarin por Daniela Oliveros Miranda, artista visual mexicana www.instagram.com/darbol_o/

 

Vlady (Влади)

Vladímir Víktorovich Kibálchich Rusakov (Владимир Викторович Кибальчич Русаков), mejor conocido como Vlady (Petrogrado, 15 de junio de 1920 – Cuernavaca, México, 21 de julio de 2005) fue un pintor y grabador ruso-mexicano con ascendencia belga y rusa.

El 5 de septiembre de 1941, el escritor y activista Victor Serge y su hijo, el pintor Vlady, aterrizaron en la Ciudad de México, exiliados de la URSS.

Vlady tuvo una gran influencia por parte del murialismo mexicano “lo primero que vi fueron los murales de Rivera y Orozco; la dimensión de sus trabajos […] Y de repente ves que Diego Rivera dibuja la gente en los mercados, esta relación inmediata, ambiental, y que adentro tiene todo el prestigio del Renacimiento, toda la pintura del siglo XV. Y que José Clemente Orozco sobrepasa de manera impresionante todo el expresionismo alemán, menudo, tímido. Todo esto me lleva a otro mundo. (…)

Vlady se naturalizó mexicano en 1949. Desde 1945 participa en numerosas exposiciones individuales y colectivas. Ese carácter volcánico de las revoluciones que describiera su padre Victor Serge, tras ser testigo del nacimiento del volcán Paricutín, lo plasmaría Vlady mucho tiempo después en su obra mayor: el conjunto de murales de la biblioteca Miguel Lerdo de Tejada, que realizó de 1973 a 1982. Con un estilo figurativo, el conjunto pictórico de unos 2,000 metros cuadrados reflejaba el ánimo de “iluminar el cielo de la utopía” y de reivindicar a los disidentes de todas las revoluciones presentes, pasadas y futuras. Le llamó “La revolución y los elementos” y lo pintó en gran parte solo –auxiliado en ocasiones por los pintores Cecilio Balthazar y Octavio Moctezuma‐ dedicándolo “a la probidad intelectual de Victor Serge y a las penas de Liuba, su madre, quien debido a la persecución constante de su familia por motivos políticos, fue internada en un psiquiátrico hasta el fin de sus días.

El mural de Vlady llama la atención de numerosos visitantes procedentes del mundo entero. Edgar Morin, Lawrence Ferlighetti, Jean-Pierre Chevênement, Michel Lequenne, Allen Ginsberg y Andrei Voznesensky, entre otros, han tenido la suerte de viajar con Vlady a través de las revoluciones.

En 1981, en plena guerra fría, el poeta estadounidense Allen Ginsberg y el poeta ruso Andrei Voznesensky proclaman unánimes su admiración por el fresco. Al final de la visita, Voznesensky exclama: «¡Y pensar que cuando regrese a la URSS no podré escribir jamás una sola línea sobre lo que he visto aquí!».

A partir de 1990, Vlady residió en la ciudad de Cuernavaca, donde fallecería en 2005 a causa de cáncer cerebral.

https://www.youtube.com/watch?v=KrqYxU72SLU

Dziga Vertov (Дзига Вертов)

Su cinta El hombre con la cámara es considerada uno de los más importantes filmes documentales de la historia.

Dziga Vertov, seudónimo de Denís Abrámovich Káufman, fue un cineasta vanguardista soviético, pionero del estilo documental de aquella época.

Denís Abrámovich Káufman nació en 1896 en el seno de una familia judía en Bialystok, ciudad perteneciente en aquellos años al Imperio ruso. Estudió música en el conservatorio de Bialystok hasta que su familia, huyendo del avance del ejército alemán durante la I Guerra Mundial, se trasladó a Moscú en 1915. Poco después, se instalaron en San Petersburgo, donde Kaufman inició la carrera de Medicina y comenzó a escribir, tanto poesía como narraciones satíricas y de ciencia ficción.

Interesado por el futurismo, adoptó el seudónimo de Dziga Vértov. Después de la revolución bolchevique de 1917  fue contratado por el Comité de Cine de Moscú para trabajar en Kinó-Nedelia, un semanario cinematográfico de noticias de actualidad soviética, donde conoció a Lev Kuleshov, uno de los pioneros del cine ruso, y al futuro camarógrafo de Eisenstein, Eduard Tissé.

A principios de los años 1920, Vértov, junto con varios jóvenes cineastas, fundó un grupo llamado Kinoki (“Cine-Ojo”), que elaboró una nueva concepción del cine documental. Vértov y sus partidarios rechazaron los tradicionales elementos del cine como guion y la participación de actores profesionales e intentaron “captar la verdad” con la cámara.

En 1922 Vértov creó la serie de noticieros cinematográficos Kinó-Pravda (“Cine-Verdad”). Muchos episodios de estos noticieros se rodaron con cámara oculta en todo tipo de lugares públicos. En 1922 Vértov creó la serie de noticieros cinematográficos Kinó-Pravda (“Cine-Verdad”).

En 1929 Vértov produjo su cinta más famosa, El hombre con la cámara. El filme muestra un día de la vida de una ciudad soviética desde el amanecer hasta la noche: tráfico, el trabajo de las fábricas, actos culturales, etc. En esta cinta experimental Vértov trató de utilizar varios métodos de montaje y rodaje innovadores para aquella época, incluida la grabación acelerada o la superposición de imágenes. El protagonista del filme es el camarógrafo, el hombre con la cámara que se encuentra en el centro de la vida y capta los ritmos de la ciudad y de sus habitantes con su aparato.

Vértov grabó el primer documental sonoro del cine soviético, Entusiasmo. La sinfonía de Donbáss (1930). El filme muestra el trabajo de los mineros de la cuenca del Donets, en Ucrania. Uno de los logros principales de la carrera de Vértov fue su teoría sobre el montaje del cine documental. Vértov afirmaba que el montaje es un elemento clave en el arte del cine.

Fuentes: https://rusopedia.rt.com/personalidades/personalidades_de_cultura//issue_271.html

https://es.wikipedia.org/wiki/Dziga_V%C3%A9rtov

La balada del soldado (Баллада о солдате)

‘La balada del soldado’ es un largometraje dirigido por el soviético Grigori Chujrai, distinguido como Artista del Pueblo de la URSS en 1981.

Ambientada durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), la cinta se centra en el recorrido físico y moral del protagonista, el joven Alyosha, un soldado de apenas 19 años, quien gana una medalla como recompensa por su heroísmo en el frente de batalla. En lugar de la condecoración, Alyosha pide unos días de permiso para poder visitar a su madre. En su trayecto, conoce el amor romántico al enamorarse de la joven Shura, pero también conoce el dolor de un militar que duda en regresar con su esposa después de haber perdido una pierna en la batalla; o la inocencia del soldado que le pide al protagonista que visite a su esposa para entregarle noticias suyas y un regalo, mientras su esposa, para sobrevivir, se ve obligada a prostituirse.

Junto con ‘El vuelo de las cigüeñas’, esta película representa lo mejor de la cinematografía soviética durante el breve periodo de «deshielo» de la Guerra Fría.

Algunos premios que recibió ‘La balada del soldado’ son:

1960: Festival de Cannes: Nominada a la Palma de Oro (mejor película)
1961: Nominada al Oscar: Mejor guión original
1961: Premios BAFTA: Mejor película. 2 nominaciones
1959: Premios David di Donatello: Plato dorado (Grigori Chukhrai)

Andréi Tarkovsky (Андрей Тарковский)

El propio Ingmar Bergman dijo una vez: «Tarkovsky es el más grande de todos. Se mueve con gran naturalidad en el ámbito de los sueños. No explica. ¿Qué es lo que debería explicar, de todas formas?»

Andréi Tarkovsky es considerado uno de los autores de cine ruso más importantes e influyentes, así como uno de los más grandes de la historia del cine mismo.

Podría parecer poco prolífico al haber realizado solo siete largometrajes, debido a los constantes obstáculos impuestos por las autoridades soviéticas, que consideraban que sus películas eran elitistas. Pero nunca comprometió su integridad artística. Sus películas, caracterizadas por largos planos secuencia, están llenas de imágenes de profunda belleza que invitan a despojarse de la idea de un significado concreto.

Tarkovsky es recordado por su extrema exigencia a la hora de preparar y dirigir sus proyectos, por sus teorías sobre el arte en general y el cine en particular (recogidas en su famoso volumen Esculpir en el tiempo), por su renuencia a acatar los dogmas culturales y las limitaciones ideológicas de su país (que finalmente lo llevaron al exilio), y por su fortísima personalidad artística.

Fue el primer cineasta soviético en recibir el León de Oro de Venecia, también por su primer filme, La infancia de Iván (1962).

Harto de las imposiciones y de la presión de las autoridades culturales soviéticas, emigró primero a Italia, donde realizó el documental Tempo di viaggio (1983) y el largometraje de ficción Nostalgia (1983), y después a Suecia, donde con parte del equipo de su admirado Ingmar Bergman, dirigió su obra póstuma, Sacrificio (1986), que terminó ya muy enfermo de cáncer, montándola y diseñando el sonido desde la cama de un hospital. Esta película es la más premiada en la historia del Festival de Cannes, con cuatro premios.

Andréi Tarkovsky es uno de los máximos representantes del cine ruso, cuyas películas son intensamente íntimas, ocasionalmente controvertidas, siempre hermosas en cada fotograma; y es por eso por lo que es considerado como un poeta del cine. Él se mostraba interesado en el hombre y su búsqueda de respuestas de la vida misma, la decadencia de la verdadera espiritualidad en la sociedad moderna y la incapacidad de la humanidad para responder adecuadamente a las demandas de la tecnología, que domina cada vez más todo el espectro de la vida humana.

Ven y Mira (Иди и смотри)

Entendí que sería una película muy brutal y, probablemente, la gente no sería capaz de verla. Hablé de esto con el coautor del guión, el escritor Alés Adamóvich, pero él respondió: «Pues que no la vean. Esto es algo que debemos dejar como legado, como evidencia de la guerra y como un alegato en favor de la paz».

Dirigida por el soviético Elem Klimóv, la película «Ven y mira» se rodó para celebrar el cuadragésimo aniversario de la victoria soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial, y fue producida por los estudios cinematográficos Mosfilm y Belarusfilm. El film relata a través de un niño, progresivamente endurecido por el sufrimiento, las masacres perpetradas por los nazis en Bielorrusia durante la Segunda Guerra Mundial, donde más de 620 aldeas fueron quemadas junto con todos sus habitantes.

Considerada como una de las películas más crueles sobre la guerra en la historia del cine, combina un realismo minucioso con momentos de lirismo. Klímov coescribió el guion junto a Alés Adamóvich, que luchó con los partisanos bielorrusos cuando era adolescente.

La banda sonora original es rítmicamente música amorfa compuesta por Oleg Yánchenko. Sólo en algunos momentos clave de la película se utiliza música, a veces mezclada con la música de Yánchenko —como el Danubio Azul de Johann Strauss II—. Al final, durante el montaje, se utilizó música de Richard Wagner, especialmente la Tannhäuser Overture y el Paseo de Die Walküre. La conclusión de la película utiliza la Lacrimosa del Réquiem de Mozart. La canción de marcha soviética «La guerra sagrada» también aparece en la película.

Ven y mira es ampliamente considerada como un éxito de crítica y aparece en muchas listas de las consideradas mejores películas de todos los tiempos.

Victor Tsoi: la voz del rock soviético (Виктор Цой: голос советского рока)

El 21 de junio sería cumpleaños de Victor Tsoi (Виктор Цой), líder y vocalista de la banda Kino (Кино), una de las más importantes del rock ruso en la época soviética.

La banda Kino (en ruso significa «movimiento de cine»), se formó en 1981 en Leningrado (hoy San Petersburgo), por por Tsoi , Aleksei Rybin y Oleg Valinskiy, cuando en la URSS el rock se movía en el underground. Dado que la música rock era considerada «antisoviética», Kino, al igual que las otras bandas de rock, actuó solo en clubes semi-underground y en apartamentos de músicos.

En el verano de 1982, el primer álbum de Kino, «45» (llamado así por su duración en minutos) se grabó como una colaboración con la banda Aquarium. El álbum se distribuyó lentamente a través de canales en el underground y le dio una nueva fama al grupo.

El primer éxito real de la banda fue el álbum Noch («noche») lanzado en 1986; las seis canciones del álbum fueron incluidas en Red Wave: 4 Underground Bands del disco de compilación de la URSS lanzado en los Estados Unidos en 1986.

Al comienzo de la era de la Perestroika, la banda trascendió el underground, lanzó varios álbumes y realizó giras, sin embargo, Tsoi murió en un accidente de auto el 15 de agosto de 1990. La cinta con la pista vocal para el nuevo álbum sobrevivió al accidente.

El último álbum (póstumo), fue el Álbum Negro (Чëрный Альбом). Las letras de Tsoi se referían a la libertad, la vida y el amor.
En Moscú, en la intersección de las calles Arbat y Krivoarbatsky, se erige un muro con grafitti dedicato a Tsoi, donde se lee: Tsoi vive! (Цой жив!)

Diego Rivera y la experiencia en la URSS

Estoy viviendo dentro de una sociedad nueva, compuesta de seres que sí son realmente seres humanos. ¡Qué fineza, qué claridad en el pensar, qué delicadeza en el sentir, qué amabilidad y qué bondad sencilla y constante!

-Diego Rivera-

Por vez primera, se realizó una retrospectiva del trabajo realizado por Diego Rivera durante los viajes que emprendiera por la URSS en la primera mitad del siglo XX.

El Museo Casa-Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, así como el Museo Mural Diego Rivera, albergan los dos periodos de este viaje por la pintura y los territorios soviéticos; el primero en 1927, cuando Rivera fue invitado por el Partido Comunista Mexicano a participar en los festejos del décimo aniversario de la Revolución de Octubre; el segundo en 1955, cuando recibió un reconocimiento del por parte del gobierno Soviético, y se sometió a un tratamiento contra el cáncer, ya que el hospital Botkin era un sitio caracterizado por el progreso en sus técnicas como la cobaltoterapia. Durante estos viajes, Diego Rivera realizó obras de caballete, dibujos y fotografías.

Más allá de los motivos arquitectónicos y los iconos soviéticos, Rivera abordó temas y personajes de la vida cotidiana, paisajes y retratos de la gente de a pie. Un extra en la exposición son los carteles soviéticos de la colección personal de Diego Rivera, en los cuales pueden observarse los elementos en común y las influencias en el muralismo del pintor mexicano.

Esta exposición, que consta de 289 piezas, resultó de cuatro años de investigación, por parte de los curadores María Estela Duarte y Mariano Meza Marroquín. Estará abierta al público hasta el 8 de abril.

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